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Por Salvatore Bellemo , 3 de enero de 2024 | 21:00Comisión para la paz y el entendimiento sesionará en Valdivia
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La Comisión Presidencial para la Paz y el Entendimiento (CPPE) que convocó el Presidente Gabriel Boric en junio de 2023 par abodar la crisis en la macrozona sur, sesionará este jueves y viernes en Valdivia
La entidad llega a la capital regional en el marco de su proceso de audiencias en regiones.
Desde este jueves los comisionados recibirán a comunidades mapuches, al consejo de loncos, gremios productivos, empresarios y víctimas de violencia.
El objetivo de la instancia es propiciar un proceso de participación y diálogo entre los diferentes actores de los territorios afectados por el fenómeno de violencia en la macrozona sur.
La comisión es presidida por el senador Francisco Huenchumilla y el ex ministro de Desarrollo Social y Familia, Alfredo Moreno. La integran la senadora Carmen Gloria Aravena, la diputada Emilia Nuyado, el presidente de la Asociación de Agricultores de Victoria Malleco, Sebastián Naveillan. Junto a ellos, los representantes de mundo social, académico y político, Adolfo Millabur, Gloria Callupe y Juan Pablo Lepín, respectivamente.
En tanto, Víctor Ramos es el secretario ejecutivo de la Comisión Presidencial por la Paz y el Entendimiento.
“La comisión tiene que liderar un proceso de diálogo con los distintos actores involucrados, con los gobiernos regionales, con las comunidades mapuche, con los gremios empresariales, con las víctimas, con la ciudadanía en general”, puntualizaba el primer Mandatario en junio, cuando firmó el decreto de su conformación.
Sus tareas
Entre sus objetivos se cuentan sistematizar la situación actual e histórica de las tierras mapuche y revisar las experiencias internacionales; establecer un canal de diálogo con los distintos actores involucrados; elaborar una propuesta con los cambios que permitan llegar a un acuerdo sobre la demanda de tierras existentes.
También, promover iniciativas de justicia hacia el pueblo mapuche, una propuesta de reparación integral a todas las víctimas, como también la incorporación de elementos que mejoren la vida y el desarrollo de todos los habitantes de las zonas involucradas.
Igualmente, con su creación se le impuso el desafío de establecer un proceso de diálogo que produzca un acuerdo preliminar con las comunidades mapuche que permita conciliar las expectativas que hoy se tienen en cuanto a reparación, con las posibilidades reales que el Estado de Chile puede ofrecer.
